TrueDepth es un sistema compuesto por múltiples sensores que incluye el iPhone X para que FaceID (el reconocimiento facial del iPhone) sea completamente seguro. Pero no solo se usa en FaceID, sino también para otros ámbitos: por ejemplo, para los animojis, esos emojis que probablemente hayas visto ya en Twitter innumerables veces que se mueven a merced de nuestros movimientos faciales.
Y a alguien se le ha ocurrido usarlo para desarrollar un juego en base a movimientos faciales. El juego, literalmente, se controla con los ojos, y sin manos, hace uso de las API que Apple ha liberado precisamente para proyectos tan creativos como este.
Es muy básico, como veremos en el vídeo superior, en el que el desarrollador, Nathan Gitter, explica, muy por encima, cómo se juega. Lo que tenemos que hacer es representar una expresión facial u otra en función de adónde nos queramos mover. El movimiento del personaje (un emoji) es vertical, pudiéndose mover para arriba o para abajo. Para moverlo hacia arriba, tendremos que representar una expresión de sorpresa; para moverlo hacia abajo, una cara de enfado.
También podemos estar quietos, para lo que simplemente tenemos que no expresar nada (la conocida poker face). El objetivo: capturar una serie de estrellas que van apareciendo sin que ningún objeto de los que aparece horizontalmente se nos cruce, lo que acabaría con la partida.
No tiene mayor ciencia, es del estilo de otros juegos en los que, por ejemplo, tienes que cruzar una carretera para recoger algo, evitando que te atropelle un coche. Por supuesto, no solo se hace uso de los ojos, sino en general del conjunto ojo más cejas, lo esencial para reconocer una u otra expresión facial.
Esto da pie a muchísimas otras posibilidades donde exprimir TreuDepth: por ejemplo, en Tinder, a la hora de descartar personas, se podría implementar esta API para que detecte la expresión facial de la persona que está usando la aplicación y que en función de ella, descarte o no.
Sin embargo, este tipo de posibilidades solamente podrán implementarse en los iPhone X, pues es el único dispositivo que, actualmente, cuenta con este sistema tan avanzado de control facial. Ni los nuevos iPhone 8 ni el resto de dispositivos de la marca es compatible, pues simplemente no monta el hardware necesario.
