Cada vez tenemos más dispositivos electrónicos que necesitan ser cargados (portátiles, teléfonos, tablets, relojes, pulseras, cámaras, gafas e incluso estamos comenzando a ver ropa), y usualmente cada uno de estos dispositivos tiene su cargador. Ya no solo es que no se usen las mismas conexiones, sino que además cada dispositivo necesita su propia potencia eléctrica: con el cargador de un portátil quemaríamos un teléfono; y con el del teléfono no llegaría para cargarla batería de un portátil).
Este cargador, Mu One, se autodenomina como el cargador de 45W más delgado del mundo, es relativamente pequeño (apenas un poco más grande que nuestro cargador de teléfono y de 14 mm de grosor) y permite cargar cualquier tipo de dispositivo, pues depende de lo que conectemos (lo detectará de forma inteligente mediante un chip integrado, que revisará el software del dispositivo) entregará más o menos potencia, por lo que no freirás tu smartphone al conectarlo. Además, incluye varios tipos de enchufes como el europeo, el estadounidense o el de Reino Unido.
El cargador usa nitruro de galio, un material con una eficiencia del 94% y que puede almacenar mucha energía en un factor de forma pequeño, lo que ha permitido administrar de la mejor forma posible el calor, además de ayudar a que el resultado final sea lo más pequeño posible. El mercado con este tipo de materiales está en auge y se espera que de aquí a 2021 lo veamos por todas partes, con una cuota de mercado de mil millones de dólares para entonces.
Servirá para cualquier dispositivo, incluso para los portátiles, pero tenemos que tener en cuenta que en este caso (en el de los ordenadores), se requerirá que tengan un puerto USB-C para poder cargarlo, pues el cargador ofrece una toma USB a la que podremos conectar nuestro propio cable. Si nuestro portátil no tiene como mínimo un USB-C, será difícil encontrar un adaptador desde la toma de corriente de nuestro ordenador hasta USB, pues probablemente ni siquiera exista.
El cargador está disponible en Kickstarter, una de las plataformas de crowdfunding más conocidas y usadas del mundo, aunque la misma compañía ya ha realizado de forma exitosa otras campañas para otros productos, por lo que es de fiar.
Tiene un precio de 39 libras, lo que equivale a unos 44 euros. De los casi 23 000 euros necesitaban para llevar a cabo el proyecto, han alcanzado con creces la meta, pues superaron los 71 000 euros, a pesar de que la plataforma en Kickstarter lleva en pie solamente menos de un día.