La Inteligencia Artificial y la robótica llega a la agricultura. La compañía Iron Ox ha presentado públicamente hoy a su primera granja de interior completamente autónoma, donde está produciendo una serie de verduras que próximamente pondrá a la venta. Cuenta con iluminación LED y todo el proceso es gestionado íntegramente mediante la Inteligencia Artificial y la robótica.
Cuenta con un sistema de monitorización basado en la nube en el que a través de una serie de sensores vigilarán a las plantas y su correspondiente crecimiento, así como al sistema hidropónico establecido, indicando a los robots cuando es el momento de la recolección y las operaciones deben realizar en cada momento, operaciones que realizarán los propios robots de manera autónoma.
Los robots existentes en la granja son Angus, el de mayor envergadura y capaz de coger palets de más de 300 kg, donde se cultivan las propias plantas, y el brazo robótico de Iron Ox, encargado de la recolección de las verduras.
Los responsables de Iron Ox, Brandon Alexander y Jon Binney, que han trabajado anteriormente en empresas de robótica, esperan producir cerca de 26.000 plantas al año.
Además, tienen la intención de lanzar otras nuevas granjas autónomas, aunque plantean lanzarlas bajo invernaderos tradicionales para aprovechar la iluminación natural del sol junto a leds de alta eficiencia para que las operaciones comerciales puedan ser rentables sin que la factura eléctrica pueda suponer un perjuicio en los resultados, según han indicado a TechCrunch.
Esta granja permitirá, por un lado, evitar la necesidad de buscar mano de obra en la industria agrícola, teniendo en cuenta que este tipo de mano de obra comienza a escasear en los Estados Unidos, y que se produzcan productos de calidad que llevar a los consumidores finales, siendo más eficiente que las granjas tradicionales.