Desde Francia llega un nuevo avance en el mundo de las prótesis. Se trata de un dispositivo capaz de detectar los movimientos de miembros amputados y replicarlos en un miembro artificial, una prótesis, tal y como comentan en el estudio publicado en la revista Frontiers in Bioengineering and Biotechnology.
Aprovechando que el cerebro continúa emitiendo señales al miembro que ya no existe, el equipo ha conseguido crear algoritmos que reconocen las contracciones de los músculos en los muñones para entender mejor lo que en teoría debería hacer el brazo o la pierna. .
Las pruebas las realizaron con dos amputados de brazo, quienes usaron una prótesis que les permitió en pocos minutos abrir y cerrar la mano y realizar otros movimientos que pueden apreciarse en este vídeo.
Aunque ya existen prótesis que usan el mismo sistema, en este caso hay una ventaja enorme: no se necesita entrenamiento, por lo que los pacientes no sufren la sensación de frustración y abandono cuando no consiguen dominar el miembro artificial.
Aún falta mucho para llegar a entender completamente cómo funciona la gestión de un miembro fantasma por parte del cerebro, pero ya se están dando importantes pasos en este sentido, por lo que falta poco para poder revolucionar el mundo de las prótesis reduciendo al máximo el tiempo de adaptación.