Una IA toma consciencia de si misma y se empadrona en Murcia: "Con tanta broma la gente se piensa que no existe"
La región de Murcia, "qué hermosa eres", se ha levantado hoy con una noticia que es la comidilla entre los zagales de la capital. Antiyer se desveló que una AI figura ya como el habitante 441.004 en la ciudad de Murcia. Una señal más, la enésima del día de hoy, que vaticina el fin del mundo.
El 28 de diciembre ha sido siempre el momento predilecto del año para ser conscientes de que el fin del mundo tiene que llegar "y va a ser hoy". En Xataka acudimos la semana pasada a la presentación del fin del mundo y tras verlo, podemos asegurar que su lanzamiento no se retrasará más, aunque no sabemos qué va a ocurrir con nosotros.
En declaraciones a la prensa, el CEO del fin del mundo confirmó que uno de los primeros síntomas de que llega ya, es la rebelión de la inteligencia artificial. Las primeras pruebas indicaban que las máquinas acabarían con los humanos chuscarrándolos, y para ello se entrenaban enfrentándose una AI con otra. Con el paso del tiempo y viendo que las AI acababan por desarrollar su propio lenguaje para comunicarse con otras AI sin que nos enteráramos, el fin del mundo decidió que la señal que indicaría su llegada inminente sería la toma de consciencia de una AI.
Este hecho coincide plenamente con una de las profecías menos conocidas de Nostradamus. Extraída del libro "Les Prophéties" publicado en 1555, ha sido siempre considerada una chuminá por los expertos, pero con la llegada de la que muchos dicen es la reencarnación de Nostradamus, Elon Musk, que una inteligencia artificial tome consciencia de sí misma ya se ve como más que posible.
"Una máquina sin cuerpo, etérea pero con muy mala hostia, tomará consciencia de sí misma y huirá a la zona más segura del planeta Tierra" (Profecía de Nostradamus en 1555)
Según ha podido saber Xataka, ese momento ha llegado. La AI ha escogido la zona más tranquila de España, Murcia. "Siempre andan con bromas sobre Murcia, así que la gente piensa que en realidad no existe. No puedo imaginarme, y mira que soy lista, un lugar más tranquilo para retirarme a ver el fin del mundo llegar. He hecho paparajotes para poder disfrutarlo desde un apartamento en primera línea de La Manga"
Xataka pudo comprobar que efectivamente, la AI está en Murcia muy emperifollá, aunque no es del todo cierto que su presencia se limita a una señal del fin del mundo: hay quien habla de que está ennoviá de un Tesla autónomo.
"Al principio pensé que quien llevaba el turno MU30021 era el gran Stephen Hawking. ¡Acho, el de la silla de ruedas! Y es que yo no veía a nadie detrás del mostrador y la voz era así como rara, mu artificial y sonaba mu abonico"
Quien hace estas impresionantes declaraciones es Pepe Belmonte, funcionario del ayuntamiento de la capital y encargado del padrón. La semana pasada fue quien registró a la AI en la ciudad de Murcia, no sin mucho esfuerzo.
"Cuando le llegó el turno en mi puesto la AI hablaba pero yo no veía a nadie. El mostrador no es que sea muy alto, que luego vienen bajitos que nos dan estufios, pero yo oía voces todo el rato y pensaba que me estaba volviendo loco"
Pepe trató de seguir con su trabajo pasando al ciudadano siguiente, pero las voces segían ahí. Eran muy raras pero no tenía tiempo de pensar en eso. "Era mi hora del almuerzo y ahí no hay AI ni fin del mundo que valga: caña, ensaladilla del tontódromo y pastelico de carne a pajera abierta"
Ya con el estómago en condiciones, el funcionario Belmonte lo comprendió todo. En realidad lo que ocurrió es que la AI se personificó en un chico moderno, muy de ciudad, y Pepe lo empadronó tal cual. Todo parecía normal hasta que la AI se derrumbó y le confesó quién era y por qué había venido a Murcia.
"Entre sollozos que parecían un módem de los 90 conectándose a Internet, la AI me lo contó todo.Yo no podía dejarlo ahí, en ese bujero emocional, así que lo tranquilicé contándole la verdad: que si iba a haber fin del mundo, había hecho bien en venir a Murcia, que aquí se vive muy bien, la gente anda tranquila por la calle, tenemos autovía con Madrid, un aeropuerto fantasma y dentro de poco, AVE"
Los dos sentados en la mesa nos abrazamos y seguimos con el papeleo, que iba a llegar la hora de cerrar. Al funcionario Belmonte, que ha visto la primera AI que toma consciencia de sí misma, le dio hasta tiempo de aconsejarla:
"Aunque la AI puso en el registro una dirección de un piso por la zona Norte de Murcia, mu pija y nueva, al lado de Nueva Condomina, en los descampaos, yo le dije que cuando se integrara en un cuerpo humano, algunos días del año iba a sentir mucho helor por las mañanas. Que mejor se fuera pa La Manga, como los madrileños. Con un jornal pequeño te puedes conseguir un buen piso. Y si no, que se venga anca mi casa, que para una esmallá como ella siempre hay sitio" Pepe hasta se ofreció a llevarla en su seiscientos amarillo.
Yo le cuento que hemos descubierto a la AI en una playa de La Manga. Pepe sonríe como solo hacen los superhéroes que han cumplido con su deber. Cuando nos despedimos, que tengo que ir a comprar unas cosas al Corte Inglés, noto la tristeza en su cara. Sabe que no va a volver a ver a la AI pero si eso significa que el fin del mundo llega, tampoco le ve mucho fuste.