'Artemisa', nuevo libro del autor de The Martian: saber cómo funcionan las cosas es clave para vivir en la Luna
¿Qué tienen en común Jazz Bashara y Mark Watney? Son personajes de Andy Weir, viven una aventura en el espacio, son deslenguados, usan el humor y en ambos casos una especie de reencarnación de MacGyver en zonas de menos gravedad que la Tierra. Ah, y que ambos son los encargados de engordar la cuenta corriente de Weir.
Tras el éxito de 'The Martian', 'Artemisa' (ya disponible por 8 euros en formato Kindle y 20 euros en papel) es la nueva novela espacial de la que queremos hablarte. Sin spoilers.
Si al oir hablar de segunda novela de Weir, el espacio y un protagonista metido en problemas para sobrevivir en el espacio, piensas inmediatamente en una especie de segunda parte de 'The Martian', mejor detente. Hay muchas, quizás demasiadas similitudes entre ambos libros, pero no estamos ante una continuación del estreno literario de Weir.
Lógicamente 'Artemisa', el nuevo libro, tira completamente del nombre de su autor y 'The Martian' para atraerte. Aquí el factor sorpresa y hasta curioso del estreno de Weir no está. Aunque para muchos del gran público, 'The Martian', el primer libro de Andy Weir, no existió hasta que saltó a escena la película protagonizada por Matt Damon, esta novela de género de ficción científica fue durante 2014 y 2015 una de las más comentadas dentro del mundillo.
Todo en 'The Martian' resultó diferente. Desde que se convirtiera en un bestseller tras empezar como una autopublicación de Weir en Amazon, hasta su mayúscula y exitosa adaptación al cine de la mano ni más ni menos que de Ridley Scott.
En 'Artemisa' el espacio tiene un papel protagonista. Ahora la acción se sitúa en la Luna, en Artemisa. De allí es nativa Jazz Bashara, la protagonista que trabaja como porteadora de material proveniente de la Tierra pero que realiza contrabando para obtener mayores beneficios con los que vivir mejor en una ciudad, la primera y única de la Luna, donde el dinero lo es todo. No es vano es prácticamente un destino turístico de ricos de la Tierra.
De pronto, Jazz ve la oportunidad de cambiar su destino cometiendo un delito a cambio de una lucrativa recompensa. Y ahí empiezan todos sus problemas, pues al hacerlo se enreda en una auténtica conspiración por el control de Artemisa que le obliga a poner en peligro su propia vida..
Es el único spoiler que os haré y que puedes leer en la contraportada del libro. Y efectivamente, de nuevo Andy Weir pone en el espacio una situación de supervivencia donde su estilo, guste más o menos, lo impregna todo.
En la forma de narrar esta aventura espacial, Weir no recurre esta vez a varios narradores, algo que funcionó muy bien en 'The Martian', especialmente en la parte a modo de diario de Mark Watney. Aquí es en todo momento la protagonista la que tiene la voz en el libro.
Andy Weir es consciente de que parte del éxito de 'The Martian' es la manera desenfadada, incluso ácida y borde que tiene Mark de contar su historia, así que aquí el perfil de la protagonista es idéntico: personaje que piensa pero sobre todo actúa y nos lo cuenta de forma directa y con humor. Personalmente hay momentos, no muchos por suerte, en que esa coloquialidad que Weir quiere traspasarnos respecto a Jazz Bashara se vuelve vulgar y demasiado directa para con el lector. Y no hubiera estado mal enfocar al protagonista de 'Artemisa' desde otro punto de vista o personalidad que no fuera tan parecida a la del Robison Crusoe de Marte.
En ese lenguaje directo y de acción no hay mucho lugar para las descripciones y mucho menos para dar más que pequeños arañazos a los personajes. A lo largo de las casi 400 páginas del libro lo que no es acción apenas se limita a aspectos técnicos o de las instalaciones y tecnologías. Ahí Weir lo vuelve a bordar y hace muy asequibles explicaciones de tareas o situaciones del espacio que son diferentes a las que estamos habituados y en las que a veces es incluso tan descriptivo que cuesta de seguir. En todo caso, la ciencia que divulga Weir es amena, curiosa en ciertos momentos y sobre todo es clave para que podamos avanzar en la historia sin que queden cabos sueltos y con nuestra dosis de "ciencia posible" del día. Y todo ello, insisto, de manera muy verosímil.
La descripción de cómo podría ser la vida en el espacio vuelve a ser realista, con escenarios, situaciones y explicaciones rigurosas con la ciencia y bien explicadas. Es sin duda el gran valor de la escritura de Weir,a lo que no le ayuda nada una traducción que por momentos es deficiente, más quizás por la desgana que por la complejidad de escritura de Weir.
En general 'Artemisa' me ha parecido un libro más dinámico, especialmente en el tercio final, donde las descripciones técnicas se hacen de manera ágil y sin que la sensación de acción quede penalizada por ello.
Junto con la ciencia de la vida fuera de la Tierra, la protagonista es el pilar de 'Artemisa'. Jazz Bashara tiene mucho del Mark Watney en cuando a ser una especie de MacGyver espacial. Hace gala durante toda la narración de muchos conocimientos técnicos pero sobre todo una facilidad asombrosa para aprender y ejecutar planes valiéndose de esa base tecnológica casi innata. En 'The Martian', Matt por lo menos era astronauta y botánico, y habida cuanta de cómo describe el genial Chris Hadfield la preparación de un astronauta en su libro "'Guía De Un Astronauta Para Vivir En La Tierra'", esa facilidad para ir solucionando problemas valiénose de la tecnología parece más justificada, y es todo un ejemplo didáctico del método de proyectos en tecnología. Pero con Bashara esas situaciones se antojan menos naturales o más difíciles de justificar. Le basta una búsqueda en Internet para ponerse al día de materiales o desarrollos de los que cinco minutos antes no sabía nada. Que no se diga que no es positiva y busca siempre avanzar y sobrevivir.
La lectura de 'Artemisa' es muy sencilla, rápida y, pasados un par de capítulos, engancha. Pero no lo hace ni por la calidad de la escritura ni por ser un libro de ciencia ficción que vaya a quedar para el recuerdo. Lo hace como cada libro de Camila Lackberg o la invasión de novela negra en serie: por querer saber qué ocurre a continuación y cómo acaba la historia. Punto. Entre esa mezcla, en 'Artemisa' encontramos algo de espíritu antiglobalización y de cierta lucha de clases.