Cada vez es más común ver por las redes sociales mensajes sospechosos de productos ridículamente rebajados, descuentos increíbles y ofertas que resultan irresistibles. Desde que Instagram se ha afianzado como plataforma de negocios y compras, encontrar a usuarios presa del "scam" empieza a ser usual.
El "scam" de Ray-Ban es especialmente agresivo en España y en Brasil desde finales de 2017
El "scam" es el nombre anglosajón que se emplea para referirse al engaño o estafa que los usuarios pueden sufrir si dan por válidas todas esas llamadas de atención mencionadas anteriormente: una web con grandes descuentos, marcas reconocidas que venden su stock casi regalado a través de Facebook… El usuario cae en la trampa, pincha en el enlace, y el daño está hecho.
Muchos usuarios españoles habrán visto en los últimos meses cómo una campaña especialmente agresiva de "scamming" está apareciendo por Instagram. El anuncio de unas gafas Ray-Ban a un precio muy bajo aparece como una publicación de un amigo o de un usuario al que seguimos. Parece publicidad, pero la foto se ha subido automáticamente desde el feed de esa persona… sin su permiso. España y Brasil son los dos países más afectados desde finales de 2017 por esta campaña, que nada tiene que ver con la empresa real.
Si esto sucede, es probable que el usuario afectado no tenga constancia de ello hasta que algún seguidor le avise o entre en su feed. Este "scam" fuerza, además, a que el resto de usuarios lo vea porque los etiqueta en las publicaciones. Aunque la mejor herramienta es la precaución y la cautela a la hora de acceder a un sitio web desconocido que promete un chollo, si ya hemos sido "captados", el primer paso es proteger nuestra identidad.
Para eso, hay que cambiar todas las contraseñas, de Facebook e Instagram, dado que ambas plataformas comparten datos. Una vez hayamos hecho esto, activar la doble autenticación en las redes sociales activas reforzará el sistema de seguridad y será más difícil que la suplantación de identidad suceda en un futuro. Aquí explicamos cómo hacerlo.
Después sería útil echar un vistazo a las aplicaciones a las que hemos dado permiso en un pasado para usar nuestra cuenta de Facebook o Instagram. En muchas ocasiones estas apps de terceros tienen brechas de seguridad, o directamente venden datos para publicidad. Esto se puede hacer entrando en el panel de Configuración de Facebook y en la pestaña Aplicaciones y sitios web. También es importante entrar en Seguridad e inicio de sesión, donde además podremos ver desde qué puntos se ha abierto sesión alguna vez con nuestros datos.
Por último, un escaneo rápido con un antivirus podrá determinar si el "scam" se ha convertido en algo más grave. Esto es especialmente importante si hemos accedido normalmente a Instagram desde un ordenador. En un futuro, atender al tipo de enlace al que estamos a punto de acceder o comprobar si existe algún tipo de estafa previa parecida a lo que tenemos en pantalla podrá ahorrarnos estas situaciones.