Se escribe un nuevo capítulo en el enfrentamiento que mantiene el servicio de mensajería Telegram y el gobierno ruso acerca de las claves de cifrado de las comunicaciones. Diversas fuentes se están haciendo eco de que hoy, viernes 13, un tribunal de la corte rusa ha otorgado el bloqueo del servicio Telegram en Rusia a petición del organismo de control de las comunicaciones del estado de Rusia.
Algunas fuentes hablan de que la prohibición ha entrado en vigor de inmediato, aunque otras citan que la prohibición entrará en vigor pronto, aunque sin una fecha determinada para ello.
Pese a ello, Pavel Durov no tiene miedo, y de hecho sigue defendiendo la privacidad de los usuarios frente a las intervenciones externas. En este sentido, hoy ha publicado un tweet donde señala que "la privacidad no está a la venta, y los derechos humanos no deberían verse comprometidos por el temor o la avaricia".
En su canal de Telegram va más allá señalando lo siguiente:
El poder que tienen los gobiernos locales sobre las empresas de TI se basa en el dinero. En un momento dado, un gobierno puede bloquear sus acciones al amenazar con bloquear las fuentes de ingresos de sus mercados y forzar a estas compañías a hacer cosas extrañas (recuerde cómo el año pasado Apple trasladó los servidores de iCloud a China.
Durov parece que no se va a echar atrás y seguirá defendiendo los intereses de los usuarios. A este respecto ha señalado que la aplicación utilizará sistemas integrados para circunnavegar la prohibición, aunque ello no garantizará el acceso al 100% al menos que los usuarios usen una red privada virtual (VPN).
Ya sólo espera que sigan sucediéndose los acontecimientos dado que ambas partes no están dispuestas a ceder.