¿Cuántas horas de sueño duermes al día? En este mundo moderno es común dormir menos de ocho, incluso siete, horas diarias. Y puede que a algunos les parezca suficiente, aunque hay quien opina que con esto no tienen ni para empezar a soñar. ¿Qué dice la evidencia científica al respecto?
La respuesta rápida a esta pregunta es un odiado "depende". Hasta la fecha, el sueño es uno de esos fenómenos que no terminamos de entender: "Cómo funciona", "para qué sirve en realidad" o "por qué" son preguntas sin una respuesta clara. "Cuántas horas de sueño necesitamos" es otra. Tras décadas de estudio hemos conseguido aproximarnos un poco a la respuesta, de manera que hacemos la recomendación de que necesitamos dormir entre unas seis horas y media y ocho.
Las conclusiones a las que han llegado muestran que para los adultos hacen falta entre 7 y 9 horas de sueño de calidad
¿Cómo lo sabemos? Entre los estudios más renombrados, concisos y bien hechos se encuentran los elaborados por la National Sleep Foundation, o NSF, que dirige la publicación Sleep Health. Esta entidad revisa, reúne y realiza investigaciones relacionadas con el cansancio, cerebro, descanso y sueño. Algunos de sus estudios más importantes han tratado de dilucidar cuánto tiempo es el mejor según el rango de edad, tanto para gente sana como para personas con un desorden del sueño.
Las conclusiones a las que han llegado muestran que para los adultos hacen falta entre siete y nueve horas de sueño. Además, este sueño ha de ser de calidad, lo que quiere decir que debe ser profundo, sin interrupciones de más de cinco minutos y con un despertar ligero y rápido. Entonces, ¿qué pasa con los que duermen menos?
El mundo moderno exige nuestro tiempo a costa de horas de sueño. No es raro dormir menos de siete horas a lo largo del día. Hay, incluso, quien alardea de estar "fresco como una rosa" tras dormir menos de seis horas. Pero expertos en neurociencia cognitiva, como Matt Walker, de la Universidad de Berkeley, coinciden con la NSF: dormir menos de siete horas no es bueno para la salud.
La deprivación de sueño continuada puede provocar problemas cognitivos: nos volvemos más lentos y más torpes. Pero, además, esto se muestra en nuestro patrón fisiológico, cambiando tras apenas unos días de sueño acumulado. También se ha asociado una mayor mortalidad, aunque este tipo de resultados son un poco generalistas y no pueden utilizarse para decir que "dormir menos de seis horas te mata".
Reducir el tiempo de sueño a cinco horas y media durante una semana reduce la capacidad de alerta, aumenta la fatiga y los cambios bruscos de humor, así como el estrés, algo que comienza a percibirse notablemente a partir del tercer o cuarto día de privación del sueño. Por si fuera poco, la falta de sueño está relacionada con enfermedades como la diabetes, la hipertensión o, incluso, la obesidad. Y esto, ¿ocurre en todas las personas? De nuevo, la respuesta rápida es sí. Pero si somos más rigurosos, existen algunas personas a las que no les afecta de la misma manera.
Curiosamente, existe una rara mutación en el gen DEC2 que permite a quien la tiene dormir solo seis horas sin sufrir "las consecuencias" de el resto de los mortales. Pero si crees que tu eres de esos "afortunados", piénsalo de nuevo, pues solo el 5% de la población disfruta de dicha condición.
Efectivamente, existen algunos estudios que indican que seis horas son suficientes para estar descansados. Hay algunos, incluso, que dicen que dormir menos de seis ayuda a reducir la mortalidad. ¿Quién tiene la razón en todo esto? En ciencia, por suerte o por desgracia, siempre habrá resultados que parecen salirse de lo que dice el consenso.
Por cada estudio dispar, hay muchos otros que confirman que necesitamos más de seis horas de sueño
Pero hay que mirar más allá. Por cada estudio dispar, hay muchos otros que confirman que necesitamos más de seis horas de sueño. Mientras que las investigaciones que apuntan a que necesitamos menos de seis horas (como las que señalábamos) tienen en cuenta, solamente, el estudio poblacional, donde las variables y su interpretación son muchas, las que advierten de que hacen falta al menos siete horas se apoyan en resultados neurobiológicos.
Es decir, también cuentan con estudios poblacionales, sujetos a un sesgo, pero existen otras investigaciones de corte molecular, neurobiológico o fisiológico que son mucho más difíciles de interpretar de forma errónea. Pero, por el momento, el consenso general está de acuerdo en que dormir poco no es bueno para la salud.
A pesar de ello, todavía hay quienes piensan que viven perfectamente durmiendo solo unas seis horas, o menos, al día. Esto se debe a que nos acostumbramos pronto y nuestro ritmo circadiano se adapta en apenas unos días, en un proceso que se denomina renomarlización. Pero la sensación de fatiga y cansancio no nos la quitará nadie.