El distribuidor de las armas impresas 3D vetadas desafía a la Justicia poniendo a la venta los planos para fabricarlas
"La era del arma descargable", como bautizó el creador de la firma Defense Distributed al periodo en el que las instrucciones para imprimir un arma en 3D serían descargables legalmente, parece que ha comenzado.
Pese a la orden judicial que lo impide, los planos de fabricación de estas armas están en línea con un precio abierto, el que se desee pagar. Aunque el precio sugerido a los usuarios es de 10 dólares.
Cody Wilson, el responsable de esta empresa responsable de producir la primera pistola hecha con una impresora 3D, Liberator, alega que la Justicia se refiere a "la distribución gratuita de los planos" y a la seguridad en el envío de estas instrucciones de impresión. Pero no se refiere, asegura, a una comercialización responsable.
Wilson ofreció una rueda de prensa diciendo que continuaría cumpliendo con la orden de la corte federal, rubricada por el juez de Washington, Robert S. Lasnik, en la que se decía que la publicación de las instrucciones supondría "una probabilidad de daño irreparable".
El fallo del magistrado calificaba el acuerdo de la administración Trump con la firma de este empresario como "arbitrario y caprichoso".
"La orden nos impidió simplemente regalar las cosas, se trata solo de una autorización para poder venderlo, ya que podemos enviarlo por correo electrónico o en una memoria USB, de manera segura", ha dicho en una rueda de prensa en la sede de Defense Distributed.
"Todos los que quieran estos archivos en Estados Unidos los tendrán", aseguró, añadiendo que durante la hora aproximada que duró la comparecencia recibió casi cuatro centenares de pedidos de los planos de las armas 3D. La publicidad generada por "la pelea legal", como ha calificado Wilson a los intentos por frenar la distribución de estas armas que provocaron incluso el recelo del presidente Donald Trump, asegura que le ha permitido recaudar 200.000 dólares en donaciones en una semana, la mitad de lo que dice necesitar para continuar.