Después de varias semanas usando el nuevo Samsung Galaxy Watch a diario, ya podemos comentar nuestras impresiones, así como ofrecer detalles de este reloj que consigue destacar en su sector ofreciendo varios recursos realmente útiles.
El Galaxy Watch que hemos probado es el de 46 mm, aunque es importante recordar que hay una versión de 42 mm, más barata pero con las mismas funcionalidades. El modelo de 42mm está disponible en negro y rosa, mientras que el de 46mm es plateado.
De todos los relojes inteligentes que hemos probado, este es el que tiene el diseño más elegante.
Como todos los relojes con sistema operativo Tizen, cuenta con una gran variedad de esferas disponibles, pero en esta ocasión destaca el efecto de profundidad e iluminación. Existe incluso la posibilidad de escuchar el tic tac, lo que da más realismo al contenido digital.
Cada modelo tiene diferentes correas disponibles, aumentando así las combinaciones existentes para personalizar el dispositivo.
Para mostrar cómo se usa, hemos grabado el vídeo que aquí os dejamos. En él es posible comprobar algunas funciones que llaman la atención:
– No es necesario estar tocando la esfera del reloj para cambiar de widget o acceder a las notificaciones, ya que la rueda externa nos permite navegar por el contenido de forma rápida y sencilla.
– Podemos ordenar los widgets existentes, y personalizar lo que cada botón hará para que seamos capaces de acceder a la información deseada en cualquier momento. Es posible, por ejemplo, poner un widget en segunda posición con la hora de otro país, para que en solo 1 segundo tengamos a mano ese dato. Las notificaciones recibidas del móvil también pueden consultarse de forma inmediata, sin ser necesario tocar la esfera.
– Es posible recibir y realizar llamadas sin sacar el móvil del bolsillo, incluso sin tocar el reloj, gracias al asistente Bixby. Podemos estar conduciendo una moto, parar en el semáforo y decir "Hi Bixby, Call Diego Polo", y realizar la llamada en ese mismo momento. El altavoz no es ninguna maravilla, por supuesto, pero es suficiente como para escuchar la voz de cualquier persona.
– Es resistente al agua, cuenta con sensores de altitud, presión y aceleración, puede conectarse a dispositivos inteligentes de nuestra casa, como la TV, el aire acondicionado y otros, el cargador es inalámbrico (y bastante elegante, por cierto), podemos realizar pagos usando Samsung Pay gracias a NFC, cuenta con GPS… es uno de los más completos del mercado.
El reloj cuenta con un reproductor de audio que puede usarse para escuchar música guardada en el dispositivo, aunque lo más interesante es instalar alguna aplicación especializada en el asunto, como Spotify, por ejemplo. El reloj LTE, que puede ser independiente del móvil, permitirá el streaming de nuestro Spotify sin necesidad de depender de conexiones Bluetooth, mientras que el no LTE es mucho más limitado en ese aspecto, ya que la app de Spotify únicamente servirá como "mando a distancia" de lo que se reproduce en el móvil.
En la imagen superior es posible ver el reproductor de audio con un audiolibro de Storytel, pero es el móvil el que está reproduciendo dicho audiolibro, por lo que no hay autonomía en este sentido.
Si queremos guardar música en el reloj para no depender del móvil e ir al gimnasio, por ejemplo, lo tenemos más fácil. Podemos controlar la música que se reproduce directamente a través del reloj controlando el volumen, cambiando de canción en cualquier momento, dando pausa o incluso alternando entre reproducción en reloj o en móvil, algo especialmente interesante, ya que ese cambio puede hacerse con un solo click.
Desde la app Galaxy Wearables, instalada en el móvil, podemos enviar contenido al reloj, incluyendo música, siendo así sencilla la transmisión de información.
Por supuesto, una ver tenemos los archivos en el reloj, pueden borrarse en cualquier momento.
El widget dedicado al deporte (de hecho hay más de uno) puede ser configurado para tener atajos a las actividades que más realizamos, tal y como os mostramos en el vídeo. Podemos indicar que estamos comenzando cualquier actividad con un solo click, permitiendo así que el reloj comience a monitorizar las variables adecuadas.
Si comenzamos a dar un paseo, por ejemplo, podemos indicarlo para que empiece a contar el tiempo, la actividad cardiaca (tiene sensores en la muñeca para eso), las calorías quemadas… son en total 39 las actividades que podemos indicar.
Además de medir actividad física, cuenta con un widget para medir el estrés. Realiza un análisis de nuestro ritmo cardiaco y decide si estamos en situación de estrés o no. En caso positivo, recomienda realizar ejercicios de respiración, y nos ayuda a sincronizar dichos ejercicios manteniendo un ritmo estable.
En caso de que se detecte que estamos hace mucho tiempo parados, nos anima a movernos, aunque sea girando nuestro cuerpo hacia un lado y hacia otro, sin necesidad de levantarnos de la silla.
Lógicamente, podemos establecer metas e instalar apps más específicas para corredores.
Si lo que deseamos es tener a mano información con las noticias más importantes del día, o las notificaciones previamente configuradas desde el móvil, solo tenemos que girar la rueda en sentido contrario o acceder a apps especializadas, como Flipboard.
El sistema de lectura es bastante inteligente, ya que mantiene la posibilidad de navegar deslizando el dedo en la pantalla, pero también es posible hacer scroll vertical usando la misma rueda de desplazamiento de widgets, lo que es ideal para los que prefieren no ensuciar la pantalla o no abusar de la puntería de su "fat finger".
Si instalamos la app de Flipboard podemos definir las categorías y el país, por lo que se hace sencillo tener un portal de selección de noticias a mano.
Si tenéis alguna duda sobre el funcionamiento del Samsung Galaxy Watch, acceded a nuestra review en vídeo y comentadlo en Youtube, allí estaremos siempre atentos a cualquier pregunta.
