Facebook, junto con otros grandes nombres como Twitter y Google, decidió hace un tiempo retirar toda clase de publicidad sobre criptomonedas, alegando que muchos de los anuncios incitaban a la inversión sin asegurar un mínimo conocimiento por parte del usuario en este ámbito.
Sin embargo, parece que el beneficio supera al riesgo y la compañía ha anunciado que vuelve a permitir, con carácter inmediato, la aparición de este tipo de anuncios en la plataforma.
Otras empresas siguieron la decisión de Facebook de prohibir los anuncios de inversión en criptos: Google, Twitter o Snapchat
La decisión llega, no obstante, con algunas condiciones. Facebook aprueba la publicidad de consultores "preaprobados", pero la prohibición todavía se mantiene para las ofertas con opciones binarias y ofertas iniciales, o ICO.
Facebook asegura que este tipo de publicidad y sus condiciones se irán revisando de forma periódica, en función de la aceptación del público y de los resultados que obtengan las campañas.
Los anunciantes deben aplicar primero para poder publicitarse en Facebook. Después, la compañía elegirá a quienes pasen los criterios establecidos, que pasan por la solvencia del negocio o la reputación de la empresa. No obstante, la red social no ha dado información sobre el valor que se le otorga a cada criterio o cómo investiga si un anunciante cumple sus requisitos.
Debido a la gran cantidad de "scammers" o estafadores que sobrevuelan el negocio de las criptomonedas, Facebook reconoce que su sistema de control aún está en proceso de perfección pero que detecta eficazmente los fraudes.
Un detalle inquietante y que hace dudar de la solvencia del sistema de control de la compañía es que Facebook sigue pidiendo a los usuarios que reporten cualquier anuncio que no cumpla con las características de confianza.
Facebook tomó la decisión de eliminar cualquier anuncio que hiciera referencia a la compra o inversión en criptomonedas al considerar que los usuarios estaban poco familiarizados con el entorno del negocio.
La idea fue aceptada meses después por Google; ambas compañías controlan la mayor parte del flujo publicitario mundial en Internet. Por su parte, Twitter solo permite la publicidad para monederos y casas de cambios, y Snapchat prohíbe aquellos anuncios relacionados con ICO.