Facebook continúa con su batalla personal contra las historias falsas y tratando de encontrar la mejor manera de que su algoritmo ordene las noticias. Por eso, y con la intención de priorizar las noticias que tengan calidad, comenzará a recompensar con mayor visibilidad a las páginas que los propios usuarios consideren fiables, tras los cambios anunciados la semana pasada.
Las pruebas comenzarán en Estados Unidos pero será una herramienta global
La compañía quiere así evitar asumir el rol de moderador y de filtro para lo que los usuarios pueden ver y compartir en la plataforma -al menos, más aún- y al mismo tiempo, ofrecer la sensación de que son los propios usuarios los que construyen el Facebook que quieren para el futuro.
Las puntuaciones a los medios de comunicación que tengan presencia en Facebook comenzarán a darse primero en Estados Unidos, a partir de la semana que viene, pero la idea es que se convierta en una herramienta común en el resto de países donde se emplea Facebook.
Pero no solo se tendrá en cuenta la buena calidad de la información o lo fiable de las fuentes: Facebook quiere impulsar las noticias locales, y el medio que apueste por ellas recibirá una mayor puntuación también por parte de la compañía.
A este respecto obedece uno de los últimos lanzamientos de la red social, la pestaña "Hoy en", que pretende aglutinar información de interés de la localidad en la que vivamos, conjugando noticias con estado del tráfico o notificaciones de la policía.
En una publicación en Facebook, su CEO, Mark Zuckerberg, reconocía el poder de las redes sociales para amplificar problemas como la desinformación o la polarización de las opiniones.
Las últimas pruebas de Facebook con respecto a las noticias incluían mantenerlas en un compartimento externo al feed de cada usuario, lo que ha llevado a que en países como Eslovaquia o Bolivia se haya disparado el número de bulos circulando por la plataforma.
Los medios son los primeros afectados por el cambio en el algoritmo: al potenciar las publicaciones de amigos y familiares, las noticias quedan relegadas a un segundo plano y las visitas y la publicidad de los medios merma en consecuencia.